martes, 30 de junio de 2009

El tren...


Estoy en una estación de tren en medio de un desierto, no hay nadie mas que yo, no alcanzo a ver ni a escuchar a algún tren acercándose a lo lejos, me siento solo, el viento corre libre por el espacio que es tan grande que no se alcanza a percibir del todo, lo único que se siente son los ardientes rayos del sol, estoy harto no puedo hacer nada, volteo hacia atrás y no hay nada mas que la pequeña estación de pueblo, completamente vacía, no hay siquiera una persona vendiendo los boletos, la caseta esta sola.

La pregunta dentro de mi cabeza no deja de dar vueltas... ¿Cómo rayos llegue aquí? No lo recuerdo, no lo puedo descifrar, ¿será un sueño? no lo creo, es tan real.

Comienzo a escuchar un ruido, parece un tren a vapor que se encuentra lejos pero poco a poco se acerca, si ahora lo veo, pareciera un tren bastante moderno, plateado con vivos en rojo bastante reluciente como si fuese nuevo, es pequeño solo tiene dos módulos posiblemente el de la cabina de mando y el de pasajeros, se para justo enfrente de mi, y la puerta se abre, entro temerosamente, y no hay nadie, justo al entrar se cierra la puerta y se escucha una tranquila canción típica de un lobby, el aire acondicionado funciona a la perfección, y poco a poco el sudor se seca de mi cuerpo y frente, me siento cómodamente en el sillón a esperar que alguien venga hacia mí, intento asomarme por las ventas pero no veo nada mas que un color del todo oscuro, no se puede ver hacia fuera.

Han pasado alrededor de cincuenta minutos y sigo sentado aquí, y pareciera que este tren no se detendrá jamás, me paro y toco la puerta de la cabina, justo al tocarla con mi puño se abre inesperadamente, para mi asombro no hay nadie dentro de ella, es solo el reflejo de la anterior, no hay un volante, algún sistema de comunicación, nada, solo ventanas y sillones, y la misma música de lobby suena una y otra vez sin parar...

Escrito por rofagolu

1 comentario:

ira dijo...

q decir ya zabez q amo lo q ezcribez